La arquitectura en la salud mental es una herramienta más que se puede aplicar para reducir el estrés, la ansiedad o la depresión. A continuación hablamos de varios elementos a tener en cuenta:
Arquitectura en la salud mental: Diseño del espacio
El diseño del espacio arquitectónico puede tener un impacto en la salud mental de las personas, ya que un espacio bien diseñado puede mejorar el bienestar emocional y físico. Los espacios abiertos, bien iluminados y ventilados pueden reducir el estrés, la ansiedad y la depresión, mientras que los espacios cerrados, oscuros y mal ventilados pueden aumentar, en general, los problemas de salud.
- La iluminación adecuada es esencial para la salud y el bienestar. El estudio Effects of realistic office daylighting and electric lighting conditions on visual comfort, alertness and mood de 2015 publicado en la revista Lighting Research and Technology encontró que la luz natural puede ayudar a reducir el estrés y mejorar el ánimo.
- Espacio abierto y bien ventilado: Un espacio abierto y bien ventilado puede ayudar a reducir el estrés al permitir que entre aire fresco y luz natural. Una ventilación adecuada puede mejorar la salud y el bienestar de las personas en los edificios.
- Evite el ruido: El ruido excesivo puede ser estresante y afectar negativamente la salud y el bienestar. El ruido ambiental puede aumentar el estrés y disminuir la capacidad de concentración.
Arquitectura en la salud mental: Accesibilidad
La accesibilidad es un factor clave en la arquitectura que, además, puede influir en la salud mental de las personas. Las barreras arquitectónicas pueden afectar negativamente la independencia y la autonomía de las personas con discapacidades físicas y mentales, lo que puede tener un impacto negativo en su salud mental.
Arquitectura en la salud mental: Diseño de interiores
El diseño de interiores puede influir en la salud mental de las personas de diversas maneras. Los colores, la iluminación, los materiales y los patrones utilizados en el diseño pueden afectar el estado de ánimo de las personas. Por ejemplo, los colores cálidos y suaves pueden crear un ambiente relajante y tranquilo, mientras que los colores brillantes y fuertes pueden aumentar la ansiedad y el estrés.
Arquitectura en la salud mental: Espacios verdes
La presencia de espacios verdes, como parques y jardines, en la arquitectura puede tener un impacto positivo en la salud mental de las personas. La exposición a la naturaleza gracias a la incorporación de elementos naturales en el diseño de un edificio, como jardines, árboles y agua, ayudan a reducir el estrés, la ansiedad y la depresión, mejorando la salud mental y emocional, así como, la atención y la concentración.
Arquitectura en la salud mental: Privacidad
La privacidad es un factor importante en la arquitectura que puede influir en la salud mental de las personas. La falta de privacidad puede aumentar el estrés y la ansiedad, mientras que la privacidad adecuada puede aumentar la sensación de seguridad y comodidad.
En resumen, la arquitectura puede influir en la salud mental de las personas a través del diseño del espacio, la accesibilidad, el diseño de interiores, los espacios verdes y la privacidad.
Aplicar la arquitectura en la salud mental también repercute positivamente en el tratamiento y recuperación de otro tipo de enfermedades o dolencias. Está demostrado que gracias a una arquitectura más consciente y amigable, los tiempos de ingreso o el consumo de analgésicos se reducen. Es importante considerar estos factores al diseñar edificios y espacios públicos para mejorar la salud mental y física de las personas, investigando y consultando con expertos en arquitectura y construcción para obtener asesoramiento personalizado.