Espacios de trabajo accesibles a personas con movilidad reducida. Empezando por la arquitectura, es muy importante aportar nuestro granito de arena para evitar que las barreras arquitectónicas lleguen al mundo laboral. Para garantizar el acceso de todos los ciudadanos al mercado de trabajo, es imprescindible que el entorno cumpla una serie de requisitos que fomenten la autonomía y la integración.

¿Qué significa esta adaptación al puesto de trabajo? 

No es solo cuestión de poner rampas en todos los accesos, como se piensa desde fuera, sino adaptar el entorno a las condiciones y personalidad del propio trabajador. Para averiguarlas, se deben analizar las necesidades y capacidades de su persona, para que sea posible adaptar de forma significativa el puesto y desarrollar su trabajo en las mismas condiciones.

¿Qué hay que tener en cuenta?

Desde que una persona con movilidad reducida entra al edificio donde trabaja hasta que sale. El acceso debe estar bien señalizado, y acondicionado con suelos antideslizantes que impidan caídas, así como bien iluminado y encaminado.

En cuanto a la adaptación del puesto y del mobiliario, hay que tener en cuenta el tamaño y la altura del mismo, respetando el espacio vital del trabajador. La adaptación de los baños también es importante, ya que su visita forma parte del día a día, así como la existencia de ascensores entre las distintas plantas del edificio, e incluso otras zonas comunes.

La ergonomía también es importante

En la adaptación de puestos de trabajo, la ergonomía facilita la incorporación de personas con movilidad reducida al mercado laboral. Les garantiza la facilidad de uso de sus herramientas de trabajo, promueve la acción de mejoras de las condiciones de trabajo y genera seguridad en los trabajadores, factores determinantes en la mejora de la productividad.

Y es que, al fin y al cabo, lo que perseguimos es la inclusión social libre de barreras.

En IYCSA estamos comprometidos con la inclusión social y trabajamos a diario para eliminar las barreras arquitectónicas y creando espacios de trabajo accesibles.

FUENTE: Euroinnova