Hormigón autorreparable. El hormigón es un material empleado en construcción, que se compone por un aglomerante (cemento) al que se añade áridos (grava, gravilla, arena), agua y aditivos específicos. Su resistencia la compresión es muy alta pero posee una resistencia a la tracción baja por lo que se suele reforzar con vigas de acero, dando lugar al hormigón armado.
Considerado un excelente material de construcción, no es del todo perfecto. Por lo general, con el tiempo, presenta grietas que afecta a la calidad de la construcción. Por ello, los investigadores buscan diferentes formas de perfeccionar este material y minimizar el mantenimiento del mismo. Son varias las innovaciones en relación al hormigón autorreparable en las que se han estado trabajando en los últimos años. Estas soluciones han conseguido rellenar las grietas formadas en el hormigón por el paso del tiempo, con el objetivo de prolongar la vida últil y minimizar los costes de mantenimiento de las diferentes estructuras de hormigón.
Hormigón autorreparable- Bioconcrete
Henk Jonkers de la Universidad Técnica de Delft desarrolló el bio-hormigón, un hormigón con bacterias incrustadas en él.
El bio-hormigón proviene de la mezcla del concreto tradicional con la bacteria Bacillus Pseudofirmus, una bacteria altamente resistente. A la mezcla de cemento se le agrega lactato de calcio del que se alimentan las bacterias y con el que forman piedra caliza al dirgerir el compuesto.
Al agrietarse el hormigón y penetrar el agua en las grietas, las bacterias comienzan el proceso y son capaces de sellar las fisuras de hasta 8mm de espesor en tres semanas
Hormigón autorreparable con anhidrasa carbónica
Investigadores del Instituto Politécnico de Worcester (WPI) han trabajado en un hormigón autorreparable utiliza la anhidrasa carbónica (CA), una enzima presente en la sangre, que reacciona automáticamente con el CO2 para crear cristales de carbonato de calcio.
Las fisuras se rellenan en unas horas imitando la estructura y resistencia del hormigón, evitando que éstas vayan a más. De esta manera alargamos la vida del hormigón y reducimos el coste de mantenimiento.
Cemento autorreparable con microcápsulas de sílice con diferentes compuestos orgánicos
La doctora Idurre Kaltzakorta ha estudiado la posibilidad de añadir al cemento, un componente del hormigón, capacidades tales como la autorreparación de grietas y el almacenamiento de energía de calor latente.
Añadiendo al cemento microcápsulas de sílice con material orgánico en su interior, con el propósito de dotar el cemento de nuevas funcionalidades:
- Microcápsulas con varias resinas epoxídicas para que el cemento pueda autorrepararse.
- Materiales de cambio de fase. Se trata de materiales que absorben o liberan una gran cantidad de calor al cambiar el material de fase (de sólido a líquido o de líquido a gas y viceversa), y posibilitan el almacenaje de la energía del calor latente en el material.
Estas son varias de las innovaciones que pretenden reducir costes de mantenimiento y alargar la vida de las construcciones siendo más respetuosos con el medio ambiente. ¿Cuál ha sido tu favorita? Te leemos en comentarios